Alejandro Pliego recibió un homenaje por su dedicación a la salud

Antonio Villalpando

A la edad de 15 años, Alejandro Sergio Pliego Rayas, coordinador de Actividad Física y Salud del Centro de Educación Física y Salud Integral (CEFSI) del ITESO, comenzó su trayectoria en el salto de altura, actividad que lo llevó a ser campeón nacional en 1984, a ser seleccionado en los centroamericanos juveniles y mayores, a obtener la medalla al Mejor deportista de Guadalajara en 1985 y a lograr el récord jalisciense en esa disciplina: 2.12 metros, marca aún vigente.

Acostumbrado a competir, concebir el deporte desde otra perspectiva parecía algo difícil para el espigado y joven atleta. 

Alejandro empezó a prepararse para cuando llegara el retiro. Estudió Medicina en la Universidad de Guadalajara (UdeG) y viajó a Alemania para hacer su especialidad en medicina del deporte. El objetivo era trabajar con deportistas de alto rendimiento. Al llegar a aquel país se le abrió un mundo diferente.

"El instituto donde estaba tenía dos ramas: atender deportistas de competencia y actividad física para la salud", explica. Ahí le tocó conocer el otro lado de la moneda.

Empezó a trabajar con un grupo de pacientes post-infartados, diabéticos e hipertensos que utilizaban el deporte como parte de su rehabilitación.

"Pacientes de 70 años con los que me iba a esquiar y lo hacían mejor que yo a mis 28, mientras que acá en México tenían a los enfermos sentados, sin moverse y con sus pastillas. Me hubiera gustado que los cardiólogos mexicanos vieran eso".

A su regreso a Guadalajara empezó a trabajar como médico del equipo profesional de básquetbol de la UdeG, pero la primera oportunidad de introducirse a la activación física de manera masiva llegó con un proyecto para el Parque Agua Azul.

"Ese fue mi laboratorio, tenía gente de todo tipo: gordos, enfermos, personas de la tercera edad y jóvenes", rememora Alejandro, quien fue reconocido por su trayectoria en pro de la salud de la población el pasado 26 de febrero, en el marco del XVIII Congreso Internacional Avances en Medicina (CIAM) Hospital Civil de Guadalajara 2016.

"Había un señor de 67 años, arrítmico, diabético y con fractura en las dos tibias. Al llegar, sus hijos tenían que bajarlo del carro. Con el paso del tiempo el señor se bajaba del coche casi saltando. Por este tipo de casos me di cuenta que para mí ya era mucho más atractiva la actividad física que el deporte competitivo".

Pasaron los años y, en 2005, llegó al ITESO con la consigna de poner en movimiento a la universidad.

De 2006 a 2015 el número de personas que hacen uso de los servicios que tiene el Centro de Educación Física y Salud Integral pasó de 2 mil 600 a 8 mil 600.